Este es el ensayo semanal de mi newsletter, La fiambrera. Suscríbete aquí
Esta publicación fue parte de la fiambrerita del 9 de junio de 2024.
Esto me emociona mucho por dos asuntos: es la primera vez que participo en una conferencia internecional y será mi primera vez en Colombia.
Nuestro panel, Puerto Rico en la Olla: Cocinando la soberanía alimentaria de Puerto Rico, el cual honra el trabajo del historiador Cruz Miguel Ortiz Cuadra—en una fiambrerita pasada compartí sobre el homenaje que se le hizo en UPR Utuado, junto con un listado de sus artículos sobre productos puertorriqueños o tradicionales de nuestra gastronomía.
La descripción del panel fue escrita por Mónica B. Ocasio, quien también gestionó este panel. Le agradezco mucho la invitación y la iniciativa. También aquí incluyo los resúmenes de cada una de nuestras ponencias.
Puerto Rico en la olla: cocinando la soberanía alimentaria de Puerto Rico
En su libro De los plátanos de Oller a los food trucks (2020), el historiador culinario Cruz Miguel Ortiz Cuadra reflexiona sobre la comida y la cocina en el Puerto Rico contemporáneo, donde el 90% de los alimentos son importados. Inspirado por esta reflexión sobre los significados de la alimentación en este contexto geopolítico, este panel interdisciplinario pone “en la olla,” en homenaje a Ortiz Cuadra, una degustación sobre la soberanía alimentaria en Puerto Rico. El paso del huracán María y otros impactos naturales resaltaron la dependencia del archipiélago en las importaciones de alimentos, generando discusiones sobre políticas futuras y justicia alimentaria a nivel local e internacional. Este panel busca explorar los significados históricos, actuales y futuros de esta realidad, promoviendo un diálogo sobre las prácticas diarias, formas de vida y resistencia relacionadas con la comida en Puerto Rico, e imaginar un futuro positivo para su soberanía alimentaria.
Como Hilda Lloréns (2021) argumenta, y como los panelistas reunidos aquí atestiguan, la comida y las prácticas que multiplica — la cosecha, la cocina y la comida en comunidad— en Puerto Rico sirven como una herramienta para imaginar y construir nuevas formas de vida a raíz de múltiples catástrofes. Así, las ponencias en este repertorio culinario, desmenuzan las causas y el funcionamiento de esta cifra en la cotidianidad y en el sistema agroalimentario. Al mismo tiempo, consideran el papel de la comida en formas de vida alternativas y en la construcción de futuros posibles en Puerto Rico.
PONENCIAS
Más allá de la supervivencia: el papel del sancocho en el goce, el placer y la soberanía alimentaria en Puerto Rico, por Mónica B. Ocasio
Esta presentación se enfoca en el papel del goce y el placer en la soberanía alimentaria en Puerto Rico. Contrario a un enfoque que utiliza el sufrimiento como base para futuros soberanos alimentarios, esta presentación hace eco de las advertencias de Krishnendu Ray sobre el “enfoque singular en el sufrimiento” y cómo ha “alienado a los académicos de la inversión del pueblo en la alegría y el placer, particularmente, la inversión de las personas pobres en el placer gustativo” (2018, 3). El domingo 18 de septiembre de 2022, los puertorriqueños sufrieron los efectos del impacto del huracán Fiona. En los días siguientes, organizaciones comunitarias, individuos y grupos de apoyo mutuo cocinaron ollas de sancocho, una sopa hecha con una combinación de carne y viandas. Al degustar con los ojos cerrados, siguiendo los aromas y las texturas de la yuca, el ñame, la malanga, tanto los cocineros como los comensales crearon platos que hablaban de algo más que el sustento nutricional; nos recordaron la centralidad del goce y el placer en las luchas políticas cotidianas en el Caribe. Los orígenes del sancocho hablan de economías de subsistencia junto con economías de plantaciones. Al poner sobre la mesa los orígenes económicos y sensoriales del sancocho, esta presentación llama la atención no solo sobre la necesidad básica de seguridad alimentaria y autosuficiencia, sino también sobre los aspectos culturales, emocionales y sensoriales vinculados a la comida.
Una mirada histórica a la zonificación de las tierras agrícolas en Puerto Rico, por Carol Ramos
Enfocado en la zonificación del suelo agrícola en Puerto Rico, esta presentación toma como invitación el legado de Ortiz Cuadra para estudiar crítica e históricamente el uso de esta herramienta en el país. Particularmente, el uso del distrito de zonificación agrícola productivo. Las tierras de mayor producción agrícola son caracterizadas por las particularidades del suelo (materia orgánica, pendiente, inundabilidad) y el clima (boscoso, costero). Y son sostenidas por la disponibilidad de trabajadores (y su demografía), el conocimiento local (experiencia en la protección de los recursos naturales como siembra al contorno y uso de agua de lluvia, por ejemplo), y el apoyo de políticas públicas favorables. Para contrarrestar la cifra de importación de alimentos en Puerto Rico, es imperante aumentar la producción local de alimentos junto a políticas públicas que faciliten la producción local, y que protejan la actividad agrícola en las tierras de mayor potencial agrícola. Una de las herramientas de planificación de uso de suelo capaces de proteger el valor y la producción local de alimentos es la zonificación. La zonificación es una herramienta que permite diferenciar los usos permitidos en las tierras agrícolas de otros usos (como residenciales, comerciales, industriales, turísticos, etc) y regula el consiguiente permiso de uso que se otorgaría en el futuro al proponente del proyecto. Este trabajo evalúa el uso de la zonificación en tierras agrícolas, promovidas por la Junta de Planificación de Puerto Rico desde los 1940s hasta el presente, y su antecedente límite constitucional de 500 cuerdas de terreno agrícola para corporaciones.
¿Podemos hablar? La autogestión y la tecnología como motores de la transformación y reconexión del sistema alimentario puertorriqueño, por Crystal Díaz
No falta en la boca de un puertorriqueño la referencia a comida en una conversación y ni pensar en una reunión donde no se planifique lo que se va a comer. Sin embargo, Puerto Rico es una Isla que a pesar de contar con suelos favorables y un clima privilegiado que permite cosechar y pescar la gran mayoría del año, apenas produce menos de un 15% de lo que come. Toda vez que la Isla es una colonia con escaso control sobre la economía política de la importación de alimentos, se propone la visión de alcanzar una mayor seguridad alimentaria y como mínimo regresar al 65% de producción local como lo fue en los años 40 (Febles, 2016). Luego de años de investigación, hay una impresión general de que el reconocimiento de que tenemos un problema que hay que solucionar comenzó a gestarse en Puerto Rico hace unos 13 años. Además de formarse una mentalidad más agroempresarial, el internet y las redes sociales han brindado un acceso e inmediatez que no existía antes. Muchas personas educadas y cansadas de la crisis socioeconómica de las últimas décadas, han sumado su inteligencia, esfuerzos, conocimientos y trabajos con una sola mira: un país con mayor seguridad alimentaria con una visión de sostenibilidad ecológica. La inacción gubernamental no ha sido obstáculo aunque el trabajo sea triple. Este trabajo evalúa la gran oportunidad que Puerto Rico tiene entre manos y que el momento de hablar de cambios profundos en la política pública es ahora.
Piezas de un rompecabezas difícil de montar: un futuro positivo para el sistema agroalimentario puertorriqueño, por Luis Alexis Rodríguez Cruz
Esta presentación utiliza datos (o piezas) de estudios con agricultores hechos después del huracán María y antes de Fiona, para montar parte de un rompecabezas sobre ese futuro que imagina el agro boricua. Son cientos las personas en Puerto Rico que viven de la agricultura y la pesca o que desean involucrarse en la producción de alimentos. Algunas de las regulaciones y leyes que rigen sus trabajos no fueron desarrolladas en Puerto Rico y si lo fueron, no necesariamente les involucraron o consideraron. La soberanía alimentaria, como enfoque, marco o guía, implica tener injerencia en la gobernanza de nuestros sistemas agroalimentarios. La realidad sociopolítica de Puerto Rico puede evitar un desarrollo pleno de la soberanía alimentaria, pero no necesariamente impide que se atisben o subsistan ejemplos de lo posible. ¿Qué necesita o desea el agro puertorriqueño para lograr un sistema agroalimentario sustentable, capaz de alimentarnos y nutrirnos, a la vez que salvaguarde nuestros recursos naturales? ¿Cuál es la opinión de productores en torno al rol de la gobernanza para con la agricultura? ¿Qué significa para parte de ese sector lo que es un futuro positivo para el sistema agroalimentario puertorriqueño? Esta presentación pretende indagar posibles respuestas a esas preguntas, además de jamaquear la caja para identificar otras piezas que nos puedan permitir completar un rompecabezas difícil de ver su imagen, pero posible imaginar y a la luz del espíritu de Cruz Miguel, divertido montar.
Esta publicación es parte de La Fiambrera, un proyecto que enlaza mis amores por la investigación en sistemas agroalimentarios, la comida y cocina, al igual que la narrativa. Recibe una fiambrerita todos los domingos. ¿No recibes una fiambrerita semanal? Suscríbete aquí. Puedes acceder el archivo de las pasadas fiambreras aquí y acá puedes ver todas las pasadas columnas.
Deja un comentario