Perros y gatos realengos que no fueron al espuma party en Cayo Matías

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Esta columna fue parte de la fiambrera del 25 de junio de 2023.


1.

Nuestras miradas se fijaron una con la otra hasta que la de él se cerró por siempre. Bruno era un perrito chulo, juguetón. Una noche se salió a la calle. Cuento largo, corto: unos perros realengos lo atacaron. Anduve con mi tía llorosa de un hospital veterinario al otro (todos cerrados) hasta que Bruno se nos fue.

2.

Nueve perros realengos conté en la carretera 14, por Jacaguas. Conté dieciocho gatos, mientras iba a casa de unas amistades en el barrio Capitanejo. Se dice que en Puerto Rico hay más de 150 mil perros y gatos en las calles. Otros destacan que pueden llegar al millón, aunque no hay un censo oficial. ¿Qué dice eso de nosotros? A veces hay que usar esta cita que se le atribuye a Gandhi: la grandeza de una nación y su progreso moral pueden ser juzgados por la forma en que se trata a sus animales.

Yo no quiero adoptar. No quiero perro, ni gato; tampoco puedo en estos momentos. Hay gente que puede, pero opta por pagar un dineral por un Dálmata o un Golden Retriever que vio en Clasificados Online. El animal, la mascota, se ha vuelto objeto que se compra para decorar. Un ser al que le damos características humanas para recibir algo que necesitamos, ya sea atención, cariño o la sensación de que cuidamos o sostenemos: antropomorfizamos. Es humano querer una mascota, claro, igualmente sentir empatía hacia otras especies. La pregunta que nos debemos hacer entonces es: ¿cuál es nuestra intención al asumir la responsabilidad de ser un guardián, de adoptar?

3.

Al municipio de Juan Díaz le cuesta $65.00 llevar un perro o un gato realengo al albergue en Ponce. Han llevado a cabo una campaña efectiva en torno a los caballos. Mi hermana por poco pierde la vida cuando tuvo un accidente de carro con uno, donde hoy juegan esos nueve perros realengos. No puedo decir que han sido igual de efectivos con los perros y gatos. ¿En serio no hay dinero para llevar a cabo campañas de esterilización? A lo mejor una ordenanza que incentive la adopción y desincentive la compra y venta de perros y gatos “de raza”. En la alcaldía me dijeron que les ayudaría tener un espacio que sirva como albergue y que el Estado asuma una responsabilidad de apoyarles, puesto que todo lo costea el municipio.

También me dijeron que tienen consciencia de que esto es una situación de salud pública. Una amiga hace poco iba caminando, haciendo sus ejercicios, y un perro la mordió. No había guardián, así que ella incurrió con los gastos en el hospital. Pasó similar como cuando mi hermana tuvo el accidente: ¿dónde están los dueños de los caballos? Sí, es una situación de salud pública, puesto que pueden transmitir enfermedades o causar daños al bienestar, pero: ¿no es también una situación de maltrato colectivo hacia ellos? ¿nos importa?

4.

Una vez espanté un gato que entró al balcón de mi casa. Admito que me molestan cuando aparecen así de repente. Una amiga que tengo es más sensible y los alimenta de vez en cuando. En la alcaldía me dijeron que alimentar un animal realengo te convierte en su guardián, por lo que pudiera tener repercusiones legales. Siempre que jugamos en la playa, un amigo les da comida a los perros realengos que hay allí, los cuales a veces se abalanzan contra otros que son traídos por personas. O sea, que, si un perro de esos muerde a alguien o causa algún daño, esa persona pudiera responsabilizar a mi amigo. La Ley de Maltrato de Animales no dice tal cosa (¿quizás es otra?). En la alcaldía también dijeron que esto es un problema de educación.

5.

A veces sí hay un problema de educación. El sentido común es el menos común de los sentidos, dicen. ¿Cómo es que había un party todo planificado en una reserva natural y los vigilantes de Recursos Naturales se fueron a las 6pm? En una entrevista, la secretaria Anaís Rodríguez Vega, ante esos cuestionamientos, dijo que no se podía tener un policía en todas las luces de Puerto Rico, por lo que no se puede pretender tener vigilantes en todos los cayos. ¿En serio? Aunque no nos debe sorprender lo ignorado que han sido sucesos en esa zona.

Misis Maldonado, en nuestro salón de segundo grado, tenía carteles de manglares, manatíes y otras especies. En la clase de ciencias, en la que a veces Misis Cintrón asistía, cantábamos y hablábamos de lo importante que es conservar los recursos naturales. La educación sí es importante, en la escuela y en la casa, pero al gobierno le compete estar educado también. Quizás si distribuyeran de mejor manera el dinero que tienen…

6.

La grandeza de una nación y su progreso moral pueden ser juzgados por la forma en que se trata a sus animales. Puerto Rico es chiquito y sus habitantes carecemos de progreso moral, puesto que vamos a la playa para bailar bajo la espuma, mientras un perro y un gato salivan al ver la comida que se le da a uno que compraron en Clasificados Online. Pero yo, alguien que come pollos y cerdos que quizás no fueron criados de manera apropiada y sustentable, ¿quién soy para criticar?


Esta columna es parte de La Fiambrera, un proyecto que enlaza mis amores por la investigación en sistemas agroalimentarios, la comida y cocina, al igual que la narrativa. Recibe una fiambrerita todos los domingos. Suscríbete aquí.

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